LA CIENCIA GEOGRÁFICA

 

La geografía es una disciplina intelectual tan antigua como la civilización. Los griegos clásicos, quienes fueron los primeros en intentar la sistematización de este cuerpo del conocimiento, lo tenían como símbolo de intelectualidad y sapiencia, y a sus practicantes, los geógrafos, se les confundía frecuentemente con los filósofos y los matemáticos. Tan grande fue la influencia de la geografía griega en la antigüedad que ella fue como el cordón umbilical de la sabiduría en épocas subsiguientes. Tanto es ello así que este apartado del conocimiento clásico suele ser considerado  por no pocos estudiosos como “madre de las ciencias”.

 

Precisamente en el siglo XIX, cuando se produce la individualización de la ciencia en ramas especializadas, correspondió al último gran cosmógrafo, al que mejor pudo compendiar la caracterización del científico universalista, a Alexander von Humboldt, la tarea de situar rigurosamente las bases de la geografía científica. Lo que hasta entonces había sido una labor de exploración, observación y descripción ilustrada con mapas —importante como las que más en su tiempo, sin lugar a dudas— se convirtió con la escuela alemana de finales del siglo en un trabajo regido por metodologías cada vez más sofisticadas.  El geógrafo descriptivista, por lo general de profesionalidad improvisada, poco a poco se fue sustituyendo en los países avanzados, durante los últimos cien años, por el analista espacial de origen universitario especializado. Más allá de la simple descripción de lugares y regiones, el geógrafo contemporáneo busca resolver problemas a partir de formulaciones hipotéticas y modelos matemáticos, utilizando técnicas de observación y medida, verificación y análisis que hagan más rigurosa la explicación de los fenómenos. Los objetivos últimos del geógrafo de principios de milenio apuntan a la generalización, que no es otra cosa que el perfeccionamiento de la capacidad predictiva de la ciencia geográfica.

 

La geografía contemporánea se ha hecho a un nicho científico cada vez más respetable, especialmente desde el decenio de los años 60, cuando se generalizó en las escuelas norteamericanas y europeas la aplicación de métodos cuantitativistas, la adopción de modelos derivados de otras ciencias y el perfeccionamiento de otros de origen propio, el uso de las computadoras y los diversos sistemas de percepción remota, además de la vinculación a su esfuerzo investigativo de la teoría general de sistemas, la ecología factorial y otras estructuras teóricas desarrolladas en la economía, la psicología social y otras ciencias.

 

Nuevos rumbos de investigación están en curso en especialismos más o menos novedosos de la geografía actual, singularmente en los de la geografía social, la percepción espacial y variantes de la geografía cultural clásica. Subsisten, no obstante, las prolongaciones actualizadas de las clásicas tradiciones geográficas, con énfasis especializados en los fenómenos físico-bióticos, los estudios regionales, el  análisis locacional y las interacciones del hombre con su medio circundante. En cualquier circunstancia, sin embargo, la especialización temática en geografía está subrayada por el enfoque espacial con el que se aborda el estudio geográfico de los fenómenos.

 

También en Colombia, como en otros países latinoamericanos, la geografía ha tenido su desarrollo, un poco tardío, quizás, pero de todos modos tipificado por una historia honorable. La Asociación Colombiana de Geógrafos (ACOGE) es la entidad que más ha contribuido a los cambios que se cumplieron en la segunda mitad del siglo XX. La creación de varios programas de geografía es la última parte de ese proceso, de la cual, sin duda, depende el futuro de la ciencia y la profesión geográficas en este entorno regional particular.

 

Unas pocas referencias generales pueden ayudar a comprender la historia, naturaleza y dimensión científica de la geografía moderna:

 

Hartshorne, Richard. 1939. The nature of geography. Lancaster, Pennsylvania, The Association of American Geographers [Reimpresión de Annals of the AAG, vol. 29, Números 3 y 4].

 

Harvey, David. 1983. Teorías, leyes y modelos en geografía. Madrid, Alianza Editorial.

 

Johnston, R.J.; Claval, Paul, eds. 1986. La geografía actual: Geógrafos y tendencias. Barcelona, Editorial Ariel.

 

Livingstone, David N. 1992. The geographical tradition. Oxford, UK, Blackwell Publishers.

 

Peet, Richard. 1998. Modern geographical thought. Malden, MA, Blackwell Publishers.

 

Unwin, Tim. 1995. El lugar de la geografía. Madrid, Ediciones Cátedra.

 

 

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